Ya me había hablado con mucho entusiasmo Pedrete de las Fiestas Santiaguistas de Estepa, su pueblo, en particular de la feria medieval que en estas ocasiones se celebraban.
Este año decidí hacerle una visita, más por amistad que por auténtico interés creyendo que sería una más entre las ferias de este tipo que ya conozco.
Una vez traspasado el umbral quedé fascinada por el enclave donde está situada: el Cerro de San Cristobal en pleno conjunto histórico de la ciudad, desde donde el paisaje a admirar es una belleza y donde todo el entorno te transporta a una época lejana consiguiendo que los atavíos antiguos y los diversos escenarios queden perfectamente integrados y acordes con la época que se representa.
No tenía previsto quedarme mucho tiempo, cosa que lamenté, perdiéndome de este modo multitud de atractivas actividades y la ocasión de visitar con calma cada rincón de este maravilloso campamento medieval.
Las Fiestas Santiaguistas continúan hasta el 19 de septiembre por lo que aún tengo la oportunidad de volver y saciarme a gusto; os recomiendo encarecidamente una visita para aprovechar la ocasión de ver en vivo en directo la artesanía más variada y de gran calidad y degustar gran variedad de productos de la zona y foráneos, no os arrepentiréis.
Os dejo unas fotos que saqué, mañana dispondré de más que espero que me envíen Pedrete y otros artesanos que allí exponían.
El enclave y su entorno
Los escenarios
La caseta donde exponía Pedrete sus miniaturas junto a los complementos de Marina Caballero y los grabados de Pedro García Soria.